Max Horkheimer en
su texto “Teoría tradicional y teoría
crítica” plantea un modo de entender la investigación científica, definiendo
teoría como un conjunto de proposiciones
acerca de un campo de objetos, donde esas proposiciones están relacionadas unas con
otras, que de algunas de ellas pueden deducirse las restantes. El sujeto y el
objeto están ciertamente separados; estos convierten la teoría en un ejercicio de pensamiento,
donde se trata de explicar el mundo tal como es.
La teoría crítica se diferencia de la teoría
tradicional, puesto que la crítica considera que tanto la ciencia como la
realidad son producto de la “praxis social”, incluyendo el sujeto y objeto
como elementos constructivos de realidad
La
“praxis cotidiana” es otro tema a tratar por el autor, donde afirma que la
transformación de las estructuras científicas depende de la situación social;
es decir, existen personas que profesionalmente se les llama científicos, pero
dentro de la sociedad también son padres,
ciudadanos, hermanos, pertenecientes a una ideología política, religión, etc.
Se habla de una teoría bien formada, donde la definición de esta es la misma
para teóricos y empíricos.
La
comunicación se convierte en el objeto de conocimiento en el momento en que el
hombre hace el papel de sujeto,
entendido como un ser que se hace dentro de la historia, un individuo que crea
un lenguaje y se posiciona dentro de una cultura o sociedad; un mundo que para
él es algo en sí presente, el cuál debe considerar y aceptar, producto de una
praxis social; lo que percibimos alrededor de nosotros es una transformación en
sí, no solo por nuestra vestimenta, en nuestro modo de sentir, el hombre es un
resultado de la historia a partir de su riqueza lingüística dentro de el
proceso de vida.
En
cuanto al positivismo, el interés por el trabajo teórico en el proceso de vida
es la parte fundamental. Los positivistas señalan como misión de la ciencia,
obtener resultados útiles al predecir hechos, donde el único conocimiento
auténtico es el conocimiento científico.
La teoría crítica tiene como fin lograr la
superación de la injusticia social, busca ser instrumento de liberación social
del hombre habitante de la sociedad moderna; para ella
solo existe una verdad. Esta comienza con determinaciones abstractas tratando a
su vez la época actual, caracterizándola como una economía basada en el cambio.
Por otra parte, para el positivismo nada
permanece idéntico, por ejemplo, el ser humano primero es niño, luego adulto;
ambos serían hechos diferentes y complejos, lo cual significa que las
cualidades, actitudes, etc. Varían de acuerdo a cada etapa.